Uber, servicio no tan seguro

Les comparto una experiencia personal con el servicio de taxi Uber. Hasta antes de mi último viaje con ellos, la verdad es que no tenía ninguna queja; sin embargo, el servicio proporcionado este domingo no sólo fue ineficiente, sino hasta peligroso. Así que más que una queja, es una advertencia cuando alguien haga uso de este servicio alternativo de taxi.

El servicio fue malo pues nos tocó un chofer que estaba o borracho o drogado. Su nombre es Gonzalo Ricardo y conduce un nissan tilda del cual desafortunadamente no logro recuperar el número de la placa. 

El viaje fue un desastre y este señor fue una verdadera calamidad: se llevó los topes y se pasó los semáforos. Lo más peligroso es que apagó el GPS de su celular y tomó una ruta deliberadamente equivocada. Al final en una curva mal tomada, el auto terminó arriba de la banqueta y ya no logró moverlo. Tuve que abordar otro taxi para llegar a mi destino.

Desde luego que presenté mi queja ante Uber. No tienen una línea directa, pero la aplicación del celular tiene opciones para presentar una queja. Debo de reconocer que la atendieron de prisa, y me reembolsaron el costo de la tarifa (la cual superó los $ 220.00 por todas las vueltas que dió el diantre de don Gonzalo), cuando es un viaje de no más de $ 80.00. 

Les recomiendo ampliamente no viajar solos en los taxis Uber. Es mentira que cuenten con un proceso selectivo de personal, ya que no es la empresa la que lo hace, sino los socios que proporcionan el auto. Este señor es la mejor prueba de que, aunque haya tenido varios viajes sin contratiempos, basta una sola oportunidad para que la pase uno bastante mal.